lunes, 27 de diciembre de 2010

Necesidades educativas

Incluso desde una mirada holistica las N.E.E. pueden ser abordadas desde la inteligencia emocional por la accion que realizan la familia, escuela y la comunidad. una actitus emapatica, positiva ayudara a los niños a que actuen con confianza.

domingo, 26 de diciembre de 2010

Necesidades educativas especiales

DESARROLLO DE LAS EMOCIONES EN LA INFANCIA


La IE, como toda conducta, es transmitida de padres a hijos como lo hemos mencionado, sobre todo a partir de los modelos que el niño se crea de sus padres.
Tras diversos estudios se ha comprobado que los niños son capaces de captar los estados de ánimo de los adultos (en uno de estos se descubrió que losbebés son capaces de experimentar una  clase de angustia empática, incluso antes de ser totalmente conscientes de su existencia). El conocimientoafectivo está muy relacionado con la madurez general, autonomía y la  competencia social del niño.
El estudio de las emociones de los niños es difícil, porque la obtención de información sobre los aspectos subjetivos de las emociones sólo puede proceder de la introspección, una técnica que los niños no pueden utilizar con éxito cuando todavía son demasiados pequeños.
Pero, en vista del papel importante que desempeñan las emociones en la vida del niño no es sorprendente que algunas de las creencias tradicionales sobre las emociones, que han surgido durante el curso de los años para explicarlas, hayan persistido a falta de información precisa que las confirme o contradiga.
Por ejemplo, hay una creencia muy aceptada de que algunas personas al nacer son más emotivas que otras. En consecuencia, ha sido un hecho aceptado el de que no hay nada que se pueda realizar para modificar esa característica. Aunque se acepta que puede haber diferencias genéticas  de la emotividad, las  evidencias señalan a las condiciones ambientales como las principales responsables de las diferencias de emotividad de los recién nacidos y que se han atribuido, en parte, a las diferentes tensiones emocionales experimentadas por sus madres durante el embarazo .
Hay también  pruebas de que los niños que se crían en un ambiente excitante o están sujetos a presiones constantes para responder a las expectativas excesivamente altas de los padres o docentes de escuela, pueden convertirse en personas tensas, nerviosas y muy emotivas.
La capacidad para responder emotivamente se encuentra presente en los recién nacidos. La primera señal de conducta emotiva es la excitación general, debido a una fuerte estimulación. Esta excitación difundida se refleja en la actividad masiva del recién nacido. Sin embargo, al nacer, el pequeño no mestra respuestas bien definidas que se puedan identificar como estados emocionales específicos. Por ejemplo: Podemos notar que cuando mamá y papá discuten en casa, el niño se pone intranquilo y hasta da berrinches sin explicación. Esta reacción afirma lo descrito.
El patrón general emocional no sólo sigue un curso predecible, sino que también pronosticable, de manera similar, el patrón que corresponde a cada emoción diferente. Por ejemplo, los "pataleos" o "berrinches" llegan a su punto culminante entre los 2 y 4 años  de edad y se ven reemplazados  por otros patrones más maduros de expresiones de ira, tales como la terquedad y la indiferencia.
Aún cuando el patrón de desarrollo emocional es predecible, hay variaciones de frecuencia, intensidad y duración de las distintas emociones y edades a las que aparecen. Todas las emociones se expresan menos violentamente cuando la edad de los niños aumenta, debido al hecho de que aprenden cuáles son los sentimientos de las personas hacia las expresiones emocionales violentas, incluso las de alegría y otras de placer.
Las variaciones se deben también, en parte, a los estados físicos de los niños en el momento en que se tratan y sus niveles intelectuales; y, en parte, a las condiciones ambientales. Estas se ven afectadas por reacciones sociales a las conductas emocionales. Cuando esas reacciones sociales son desfavorables, como en el caso del temor o la envidia, las emociones aparecen con menos frecuencia y en forma mejor controlada de lo que lo harían si las reacciones sociales fueran más favorables; si las emociones sirven para satisfacer las necesidades de los niños  esto influirá en las variaciones emocionales citadas previamente.
Los niños, como grupo, expresan las emociones que se consideran apropiadas para su sexo, tales como el enojo, con mayor frecuencia y de modo más intenso que las que se consideran más apropiadas para las niñas, tales como temor, ansiedad y afecto.  Los celos y berrinches son más comunes en las familias grandes, mientras que la envidia lo es en las familias pequeñas.

Familia y la escuela

La familia como eje modelador

La  personalidad se desarrolla a raíz del  proneso de socialización, en la que el niño asimila las  actirudes, valores y costumbres de la sociedad. Y los padres son los encargados de contribuir en esta labor, a través de su  amor y cuidados, de la figura de identificación que son para los niños (son agentes activos de socialización). Es decir, la vida familiar es la primera escuela de aprendizaje emocional. También influye en mayor número de experiencias del niño, repercutiendo éstas en el desarrollo de su personalidad. De tal manera que los padres contribuyen al desarrollo de la cognición social de sus hijos al motivar, controlar y corregir la mayor parte de sus experiencias.
Partiendo del hecho de que los padres son el principal modelo de imitación de los hijos, lo ideal es que, como padres, empecemos a entrenar y ejercitar nuestra propia Inteligencia Emocional para que a la vez, nuestros hijos adquieran dichos hábitos en su relación intrafamiliar. 
Si  analizamos esta regla podemos obtener cinco principios en la relación emocional Padres e Hijos:
1.   Sea consciente de sus propios sentimientos y el de sus hijos.
2.   Muestre empatía y comprenda los puntos de vista de sus hijos
3.  Haga frente de forma positiva a los impulsos emocionales y de conducta de sus hijos y regúlelos permanentemente. Recuerde que los niños aprenden inicialmente por medio del ensayo error o la repetición constante de las reglas de interrelación social.
4. Plantéese conjuntamente con sus hijos objetivos positivos y trace proyectos de vida con alternativas reales para alcanzarlos
5.  Utilice las dotes familiares y sociales positivas a la hora de manejar sus relaciones con sus hijos. Insistimos, los niños aprenden de manera repetitiva y por medio del ensayo-error.
Estos cinco principios son básicamente los cinco componentes de la Inteligencia Emocional.

sábado, 25 de diciembre de 2010

EL ANALFABETISMO EMOCIONAL

Las claves en la educación emocional parten de la infancia, -además de otras cuestiones biológicas y culturales-, por lo que puede llegar a darse el Analfabetismo Emocional.

Goleman expresa en su tratado la preocupación por los males actuales crecientes de violencia, drogadicion, marginación, depresión y aislamiento crecientes, sobre todo en el período de socialezaciòn de la persona en la infancia, " precio de la modernidad". Su respuesta de solución se fundamenta en las "competencias emocionales" –conocer los sentimientos-, "competencias cognitivas" –de la vida cotidiana- y "competencias de conducta" –verbal y no verbal-.
Hay que educar al afecto mismo, poniendo énfasis en los momentos emocionales más caóticos. Por tanto, cuando se habla de Inteligencia Emocional se debe desarrollar personalmente un ejercicio de reafirmación y re - dirección de Visión, misión y valores Personales, Familiares, Profesionales y Ciudadanos, a través de preguntas activas simulaciones y visualizaciones de las cosas que influyen filosóficamente en nuestra vida, sueños y principios sobre las cuales basamos nuestro actuar.
Recordando que ante todo somos seres humanos, que tenemos necesidades y metas, las cuales las aceptemos o no, racionalmente. Una de estas es el vacío personal de emociones, sentimientos y caricias que no se han recibido o las hemos tenido en un grado muy tenue. Sabiendo que la interacción familiar y de amistad es un factor decidor de nuestra vida; y, que el buen o mal trato emocional que recibimos, marca toda nuestra existencia, determinando y organizando todos los pocesos mentales y comportamientos futuros para aciertos o desaciertos en lo familiar, social y profesional.

Autoestima

LA INTELIGENCIA INTRAPERSONAL EN EL AULA

La inteligencia interpersonal determina en gran medida el éxito o el fracaso de nuestros estudiantes. Desde el punto de vista del profesor es también tremenda mente importante porque de ella depende que acabemos el curso en mejor o peor estado anímico. Para los estudiantes es importante porque sin capacidad de auto - motivarse no hay rendimiento posible.
Cualquier aprendizaje supone un esfuerzo. El  control de las emociones es importante no sólo durante un examen, sino en el día a día. Cualquier aprendizaje de algo nuevo implica inevitables periodos de confusión y frustración y de tensión. Los estudiantes incapaces de manejar ese tipo de emociones muchas veces se resisten a intentar actividades nuevas, por miedo al fracaso.
Desde el punto de vista de los profesores no podemos olvidar que en muchos países la docencia es una de las profesiones con mayor índice de enfermedades  mentales como la depresión. Si nuestros estudiantes pasan por periodos de frustración y tensión, ¿qué no decir de nosotros, los profesores?
A pesar de su importancia la inteligencia intrapersonal está totalmente dejada de lado en nuestro sistema educativo. La inteligencia intrapersonal, como todas las demás inteligencias es, sin embargo, educable.

inteligencia emocional aplicada en los colegios

LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN LA ESCUELA

Si nos detenemos a analizar el tipo de educación implantada en años atrás, podremos observar cómo los profesores preferían a los niños conformistas, que conseguían buenas notas y exigían poco (de esta forma se estaba valorando más a los aprendices receptivos más que a los aprendices activos), y de hecho respondiendo a las ideas de alienación que se implantaba en nuestra educación y por tanto en nuestra sociedad, de ir siempre por la "Ley del menor esfuerzo" (Parece aberrante esta afirmación pero a lo largo de nuestra tarea docente hemos verificado en muchas instancias estas prácticas).
De este modo, no era raro encontrarse con la profecía autocumplida en casos en los que "el profesor espera que el niño saque buenas notas y éste las consigue", quizá no tanto por el mérito del niño en sí, sino por el trato que el profesor le daba en la calificación de sus tareas, pruebas, etc. También se encontraban casos de desesperanza aprendida, producida por el modo en que los profesores respondían a los fracasos de sus estudiantes.
Este orden de cosas ha cambiado o deberían cambiar, pues los docentes nos debemos comprometer en que la escuela sea la formadora de personas inteligentemente emocionales, creativas y productivas.
Hoy, con la apertura del mercado global, necesitamos desarrollar soluciones desde las aulas de clase hacia las necesidades de producción de nuestra gente, respetando nuestras raíces culturales y nuestra identidad, pero tolerando lo foráneo, adaptándonos en lo posible con rapidez a los cambios que se dan en la ciencia y la tecnología y por tanto en la sociedad.
Para lo cual, se debe replantear el currículo escolar o por lo menos el de aula en el que se brinde herramientas académicas básicas como el manejoefectivo del lenguaje, el trabajo empático y en equipo, la resolución de conflictos, la creatividad, el liderazgo emocional, el servicio productivo…
La educación de las emociones denominada "Alfabetización Emocional" (también, escolarización emocional), pretende enseñar a los niños a modularsu emocionalidad desarrollando su Inteligencia Emocional.
Los objetivos que se persiguen con la implantación de la Inteligencia Emocional en la escuela, serán los siguientes:
• Detectar casos de pobre desempeño en el área emocional.
• Conocer cuáles son las emociones y reconocerlas en los demás
• Clasificar sentimientos, estados de ánimo.
• Modular y gestionar la emocionalidad.
• Desarrollar la tolerancia a las frustraciones diarias.
• Prevenir el consumo de drogas y otras conductas de riesgo.
• Adoptar una actitud positiva ante la vida.
• Prevenir conflictos interpersonales
• Mejorar la calidad de vida escolar, familiar y comunitaria
• Aprender a servir con calidad.
Para conseguir esto se hace necesaria la figura de un nuevo Profesor, con un perfil distinto al que estamos acostumbrados a ver normalmente y que aborde el proceso de "Alfabetización Emocional" de manera eficaz para sí y para sus estudiantes. Para ello es necesario que él mismo se convierta en modelo de equilibrio de afrontamiento emocional, de habilidades empáticas y de resolución serena, reflexiva, creativa y justa de los conflictos interpersonales, como fuente de aprendizaje ejemplar para sus estudiantes. Este nuevo Profesor debe saber transmitir modelos de afrontamiento emocional adecuados a las diferentes interacciones que los niños tienen entre sí.
Por tanto, no planteamos solamente la existencia de un Profesor que tenga un conocimiento óptimo de las Áreas y/o Asignaturas que dicte en el aula de clase, sino que además sea capaz de transmitir una serie de valores y desarrolle competencias a sus estudiantes, como la Competencia Emocional.
Funciones que tendrá que desarrollar el nuevo Docente:
1.
2. Orientación Familiar en el contexto de familias disfuncionales o mononucleares, producto de la migración, del individualismo o cultura light.
3. Percepción de necesidades, intereses y problemas de los niños, en concordancia con las necesidades, intereses y problemas del medio inmediato (familia y escuela) y mediato (barrio, comunidad, etc.).
4. El establecimiento de un clima emocional positivo, ofreciendo apoyo personal y social para aumentar la autoconfianza y autoestima de los niños que se atiende en el aula de clases
5. Ayuda a los niños a establecerse objetivos personales con sujeción a sus proyectos de vida.
6. Facilitación de los procesos de toma de decisiones y responsabilidad personal.
7. La orientación personal del niño que propenda su desarrollo emocional.
La escolarización de las emociones se llevará a cabo analizando las situaciones conflictivas y problemas cotidianos del contexto familiar, escolar y comunitario, que generan tensión y propiciar el desarrollo de las competencias emocionales en los niños.
Por último, vamos a puntualizar que para que se produzca un elevado rendimiento escolar, el estudiante debe contar algunos factores importantes en el ámbito intra y extra escolar:
1. Confianza en sí mismo y en sus capacidades
2. Curiosidad por descubrir
3. Solución de problemas familiares y escolares
4. Intencionalidad, ligado a la sensación de sentirse capaz y eficaz.
5. Autocontrol
6. Relación con el grupo de iguales
7. Capacidad de comunicar
8. Cooperar con los demás y trabajar en equipo
De este modo, debemos resaltar que para una educación emocionalmente inteligente lo primero será que los padres y maestros de los futuros niños escolarizados proporcionen ese ejemplo de Inteligencia Emocional, para que una vez que éstos comiencen su educación regular, estén provistos de un amplio repertorio de esas capacidades emocionalmente inteligentes.

Inteligencia Emocional e Inteligencias Multiples

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Principios básicos para educar con una disciplina positiva y efectiva: Establecer límites y reglas claros.

-Dar advertencias y señales al niño cuando comienza a comportarse mal. Es una manera de enseñarles autocontrol.
-Reforzar las buenas conductas con elogios y afecto ignorando las conductas que sólo buscan llamar la atención.
-Educar a los hijos conforme nuestras expectativas. Dedicar tiempo para conversar sobre los valores y las normas y por qué estos son importantes.
-Cuando se transgrede alguna norma o límite puesto, imponga inmediatamente una consecuencia adecuada y proporcionada.

Inteligencia Emocional Por Daniel Goleman

La inteligencia emocional es la capacidad para reconocer sentimientos propios y ajenos, y la habilidad para manejarlos. El término fue popularizado por Daniel Goleman, con su libro: Emotional Intelligence, publicado en 1995. Goleman estima que la inteligencia emocional se puede organizar en cinco capacidades: conocer las emociones y sentimientos propios, manejarlos, reconocerlos, crear la propia motivación, y gestionar las relaciones.

El objetivo de este Blog es

Dar a conocer a los interesados otra mirada y propuesta innovadora sobre la inteligencia específicamente orientada hasia los niños, es importante que cambiemos la mirada, ya que hoy en día ya no solo se considera el coeficiente intelectual (C.I) de las personas, si no que es de igual importancia el coeficiente emocional (C.E), se cree que nuestras decisiones y comporta miento ante diversas situaciones primero las enfocamos desde lo emocional y en segundo lugar desde lo racional, esto es lo que permite que tomemos decisiones.

Un coeficiente emocional (CE) elevado
es tan importante como
un coeficiente intelectual (CI) elevado
.